Se trata de un convenio suscrito entre la CEM, APOMA y la propia Universidad de Málaga por el que tendrán trabajo durante seis meses
El entendimiento entre el sector formativo y el empresarial es clave para mejorar la inserción laboral. De eso parecen conscientes los miembros de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), la Asociación de Polígonos de Málaga (APOMA) y la Universidad de Málaga (UMA), que el pasado 20 de diciembre firmaron un convenio de colaboración por el que un total de 80 universitarios malagueños podrán realizar prácticas laborales en empresas enclavadas en polígonos industriales de la ciudad.
La convocatoria se realiza a través del Vicerrectorado de Innovación Social y Emprendimiento y se podrá presentar entre el 9 y el 30 de enero.
A ellas podrán optar universitarios que estén matriculados en estudios de Grado con el 50% de los créditos superados, ser alumnos de títulos de postgrado oficiales o títulos propios, ser menor de 30 años, no haber disfrutado de este programa en convocatorias anteriores, no tener relación laboral que pudiera resultar beneficiaria del programa así como estar registrados en la plataforma de gestión de prácticas Ícaro y mantener la condición de estudiantes durante dichas prácticas.
Los beneficiarios percibirán unos 360 euros al mes. Se incorporarán entre el 1 de marzo y el 1 de abril y concluirán su trabajo antes del 30 de septiembre.
No es la primera vez que se firma un acuerdo similar. En 1993, el entonces presidente del Consorcio de Polígonos, Julio Gutiérrez, suscribió un convenio con dicho centro para favorecer la inserción laboral de sus alumnos.